Este viernes se reportó el desplome de una avioneta en la zona alta de Tapachula, Chiapas. De acuerdo con medios locales y testimonios de habitantes de la comunidad de Pavencul, la aeronave transportaba al menos a nueve personas y formaba parte de una estrategia para combatir la plaga del gusano barrenador.

Según los primeros reportes, la misión de la avioneta era la dispersión de moscas estériles, una técnica utilizada para contener la propagación del gusano barrenador, que afecta al ganado y otras especies animales.

De manera extraoficial, medios locales mencionan que no hubo sobrevivientes, pero al momento no hay un reporte oficial.

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El estruendo del impacto fue audible a varios kilómetros y provocó alarma entre las familias de la región. Elementos de emergencia y cuerpos de seguridad se trasladaron de inmediato al lugar para iniciar labores de rescate y acordonar la zona.

Hasta el momento, las autoridades no han confirmado el número de víctimas ni la causa del accidente.

Este accidente ocurre en medio de una emergencia sanitaria por la presencia del gusano barrenador en el sur del país, lo que ha llevado al cierre temporal de la frontera con Estados Unidos para la exportación de ganado bovino mexicano desde el 11 de mayo.

Sobre el gusano, la presidenta Claudia Sheinbaum informó que aún no hay una fecha definida para la reapertura de la frontera.

“Ahorita todavía no hay una fecha para la reapertura. Va avanzando (la revisión) y el secretario (de Agricultura, Julio Berdegué) les puede dar los detalles”, explicó en conferencia de prensa.

El secretario de Agricultura, Julio Berdegué, detalló que una misión técnica del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) se encuentra en México para evaluar las acciones implementadas contra la plaga. Además, destacó la próxima operación de una planta productora de insectos estériles en el sur del país como parte de la estrategia nacional de control sanitario.



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