El pasado sábado 14 de junio Nitsa Club acercaba en la Sala Apolo de Barcelona una noche remember del sello Gigolo Records. Un line up de 5 artistas con reconocimiento internacional innegable entre los que encontrábamos a Anthony Rother, Terence Fixmer en formato Live, DJ Hell y The Hacker.
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La noche empezaba con Jessica Bellomo, artista ítalo-argentina, que abría la noche con un set marcado por el EBM, electro y techno mientras el público se empezaba a aglutinar frente a un escenario que en pocos minutos no dejaba un solo hueco para disfrutar del siguiente artista. Aunque era un hecho que la fecha había acercado al público con el que Barcelona de por si contaba por ser esta la Off Week, una gran celebración de la música en la ciudad, las conversaciones entre el público comentando los kilómetros que habían recorrido para disfrutar del evento fueron también protagonistas de la noche.
Anthony Rother tomó el relevo a la DJ y empezaba su Hybrid Set, con una sala dispuesta a bailar a artistas que han unido varias generaciones. En su set podíamos reconocer las producciones de sus últimos años, y una progresión desde electro, con las vocales robóticas del Vocoder tan característico del productor, hacía el techno, para volver a hacerse con la emoción de la pista, manteniendo siempre una profunda atención en ésta, con la que interactuaba en todo momento. Anthony Rother tiene una conexión y cercanía con el público muy especial, cuenta son su cariño y es un hecho en todas sus actuaciones.
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Le siguió el live de Terence Fixmer, el cual actuaba con una camiseta con el logo del proyecto que tenía con el recién fallecido Douglas McCarthy. La noche tenía un aura emotiva en todos los sentidos, por momentos la alegría de estar presentes en esa noche se unían con el respeto hacía un artista admirado por los que allí estábamos, que acababa de fallecer dejando un legado innegable. Nos estremecíamos buscando alrededor la mirada cómplice de los compañeros de pista. Por mi parte, quiero agradecer a estos artistas que honraran con nosotros en esta noche a su compañero. Igual que me sentí en ese momento me encuentro ahora, emocionándome mientras relato mi experiencia desde mi ordenador: GRACIAS.
Terence Fixmer fue el más fiel al sonido de Gigolo Records de la noche. Se pudieron reconocer en la sesión de éste temas del EP ‘Between de Devil’, del que comparte autoría con McCarthy además de ‘Body Pressure’ y ‘Rage’, entre otros, del álbum Muscle Machine. Y obviamente mezclas de los Nitzer Ebb como ‘Join The Chant’ o el rework del productor de ‘Let Your Body Learn’, con la que todo el público enloqueció, reconociéndola al primer acorde como en ningún otro momento de la noche. Terence levantó la cabeza de inmediato, dirigiendo la mirada hacia el público, mientras elevaba la mano con el puño cerrado, que agitó en un visible gesto de emoción por aquel momento. El fallecimiento de su compañero, figura esencial del EBM y que tanto ha marcado el sonido de Terence, con el cual ha compartido éxitos de la carrera de ambos es un acontecimiento demasiado cercano a la noche de la actuación como para no rendirle homenaje.
El relevo lo cogía la elegancia que desprendía The Hacker tras la cabina. Sin duda costaba tomarse un descanso en cualquier momento de la noche, pero en este momento de la noche, la agradable y amplia terraza con la que cuenta la Sala Apolo, era un lugar que atraía a los que necesitábamos descansar un rato las piernas, para volver con más ganas aún a bailar los remixes de ‘Turborave’, tema producido por él mismo o ‘Los Niños del Parque’.
Por su parte, DJ Hell, fundador en 1996 del sello del que llevaba el nombre la fiesta, Gigolo Records, se decantó más por el electro clásico que por el sonido electroclash del que Gigolo fue una explosión. Gigolo nació como un espacio de propuestas arriesgadas, para reinterpretar el electro de los 80 para las nuevas generaciones. Así que la sensación fue que su fundador, Helmut Geier, quiso con su set acercar el espíritu original del sello a Barcelona en esta semana tan concreta.

El set en B2B de The Hacker y DJ Hell fue la simbiosis perfecta de la noche, dejándose respetuosamente turno sin intervenir en la selección del compañero y sin entorpecer su trabajo, como tan acostumbrados estamos a ver en las nuevas generaciones. Los clásicos no pararon de sonar en el B2B de estos dos DJs, entre ellos podemos destacar ‘La Rock‘ de Vitalic.
Cabe destacar la presencia de todos los artistas en todo momento en el escenario mientras el resto de compañeros de lineup llevaban a cabo su set. Una clara muestra de respeto por esa noche que a tantos nos reunió en la Sala Apolo. Las caras conocidas de amigos que habían recorrido kilómetros en coche, cogido aviones o incluso ferries para esta noche, abría una pregunta en mi cabeza, y es si esta misma noche habría tenido una acogida igual en otra ciudad que no fuera Barcelona. Un maravilloso recuerdo difícil de repetir.
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