Un militar, identificado como Jairo “N”, fue detenido por su presunta participación en el abuso sexual de una niña de nueve años que vendía chicharrones, ocurrido el pasado sábado en el interior de una guarnición militar en Cozumel, Quintana Roo.

La detención fue confirmada por la Fiscalía General del Estado (FGE), mientras que los padres de la víctima han denunciado actos de revictimización por parte de funcionarios públicos, incluido el alcalde de la localidad.

Según un comunicado de la fiscalía de Quintana Roo, la detención de Jairo “N” se llevó a cabo en una operación conjunta con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Fuerza Aérea, la Guardia Nacional y la Dirección de Seguridad Ciudadana de Cozumel.

La Fiscalía informó que la menor “recibió de manera oportuna atención médica” y se le realizaron los estudios correspondientes. Además, se indicó que instancias como el Sistema DIF y el Grupo Especializado de Atención a la Violencia Familiar y de Género (Geavig) están brindando acompañamiento.

Por su parte, Jairo “N” fue puesto a disposición del Ministerio Público, quien definirá su situación jurídica en el término legal correspondiente.

Foto: Cuartoscuro

De acuerdo una entrevista realizada por la periodista Silvia Peraza, de Código Rojo, a la madre de la menor, el suceso ocurrió cuando la niña fue subida a la fuerza a una motocicleta por el soldado. Posteriormente, el individuo ingresó con ella a la Guarnición Militar por la entrada principal, pasando la pluma de acceso frente a otros militares.

La narración de la madre detalla que la niña fue llevada a una vivienda dentro de la unidad habitacional, donde el agresor presuntamente la presentó a tres menores que serían sus hijas. “Es ahí donde la toca enfrente de las niñas”, relató la madre. El diario El País añadió que el hombre amenazó a la menor con matar a su madre si gritaba.

Posteriormente, según el testimonio, el agresor la llevó a un paraje solitario dentro del mismo complejo militar, donde continuó el abuso y la arrojó de la motocicleta en movimiento. La menor logró escapar y fue encontrada en el malecón por una mujer, presentando raspones.

El País reporta que pobladores se manifestaron masivamente en la instalación militar, arrojando piedras y quemando la garita de seguridad, lo que derivó en enfrentamientos y saqueos a una tienda de la Sedena. El general a cargo de la guarnición, Armando Toscano Yáñez, salió a dialogar con los manifestantes, asegurando que se realizarían las indagatorias correspondientes.

Foto: Cuartoscuro

En medio de la tensión, las declaraciones del presidente municipal de Cozumel, José Luis Chacón Méndez, generaron indignación. Según cita El País, el alcalde responsabilizó a los padres: “No se puede dejar sola a una menor, menos sábado, de noche, cuando desafortunadamente la gente ya tomó sus tragos (…) Perdón lo que voy a decir, si ven a un menor vendiendo chicharrones, dulces o chicles, no les compren”.

Los padres de la víctima, en las declaraciones recogidas por la prensa, desmintieron al alcalde, explicando que ellos se encontraban atendiendo su propio puesto ambulante cerca de la zona, como era su costumbre.

Foto: FB (José Luis Chacón)

Finalmente, el diario español recoge el temor expresado por la familia de la víctima tras los hechos: “Quisiera hacer público que si algo me llega a pasar a mí o a mi familia, hago responsable a la milicia, a la Fiscalía y al presidente municipal. Porque nos han hostigado”.



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